Años
Inolvidables (1966), John Dos Passos.
Últimamente me está apeteciendo mucho
leer libros donde pueda encontrar impresiones sobre España, sea cual sea la
época, desde la óptica de un extranjero. Dicho sea de paso, estoy abierto a
sugerencias, a través del apartado llamado “comentarios”.
Con este reclamo empecé a leer esta obra.
El autor, americano y desconocido hasta ahora para mí, poseedor de una amistad
con Hemingway que tuvo un final agridulce, llevó una juventud rebelde y hasta
contestataria, participando, entre otras causas, en defensa de los injustamente
condenados Sacco y Vanzetti, pero que
sin embargo, llegó a una madurez más bien escéptica, y hasta reaccionaria,
desengañado por los múltiples fracasos que atesoraron las izquierdas en Europa,
principalmente.
Lo cierto es, que lejos de profundizar en
opiniones muy rebuscadas en relación a lo que a nuestra piel de toro de refiere
(hasta hay una errata, señalada por el traductor, retrasando, nada menos que un
mes, la fiesta en honor al célebre patrón de Pamplona) si se dan buenas
pinceladas acerca de la idiosincrasia más costumbrista de nuestros compatriotas
de la época (años 20-30 del s.XX), narrando algunas peripecias de la mano de
Unamuno o Machado, por ejemplo, o algún interesante pasaje de nuestra historia,
como la salida del trono de Alfonso XIII, y el ambiente que se respiraba en las
calles de Madrid.
El libro es, en realidad, como su propio
título sugiere, una bucólica rememoración de acontecimientos sucedidos al
propio autor, al menos, una treintena de años antes de la materialización de
este trabajo, con todo lo que ello conlleva: una (probable) deformación de la
realidad, aderezada con nostalgia de abuelo que busca congraciarse con el
pasado, rebuscando en el baúl de los recuerdos, otro tiempo que siempre fue
mejor. ¡Y vaya si lo fue! Que envidia da
el ritmo viajero que debió llevar este señor.
Empezando por su confusa militancia
pacifista, como camillero por la
Francia e Italia de la I
Guerra Mundial, hasta peregrinas excursiones por Oriente
Medio, travesías transdesérticas incluidas, sobornando árabes convulsos y
conspiradores, y oyendo “la cadencia del rezo musulmán”, y sin evitar pasar de
puntillas por la Rusia
post-revolucionaria, donde Stalin empezaba a hacerse fuerte, y él relata someramente,
pros y contra de la política soviética. Entre viaje y viaje, aparte de escribir
libros para ganarse el sustento, pasaba cómodas y ociosas estancias en Nueva
York, o en un lugar de recreo llamado Key West, en la península de Florida, donde
alternaba con un abrumador exceso de personajes, de la farándula, la
literatura, el arte o la política, irrelevantes en su mayoría. Si, amigos.
Tantas presentaciones precipitadas, ahogan al más pintado (lector).
En este último lugar de recogimiento es
donde más se acerca, y paradójicamente más se aleja, de Hemingway, con quién
comparte aventuras pesqueras. También goza de otras, más bien
ludico-gastronómicas en nuestro país. Este es el segundo reclamo oficial del
libro, al parecer, y lo que suscita unas reflexiones personales, las únicas
prácticamente, del autor, que fueron las que me animaron a mí a hacer este
comentario sobre el libro, que en un principio no contemplaba.
En definitiva, un libro bien interesante
en lo que a relatos maravillosos se refiere, por la riqueza, el realismo, y el
ritmo del autor, y que me ha motivado algunos buenos intereses personales, así
como un conocimiento bastante general acerca de lo que vende la editorial que
trata el libro.
Pues nada habrá que leerlo entre otras cosas porque no has contado mucho de que va :P
ResponderEliminarAhí te va Españaza desde la optica de un extranjeros, particularmente en la edad de oro de la generación perdida los 30 http://www.bduimp.es/archivo/conferencias/pdf/PR_86_10017_05_Dietz_Espa%C3%B1a.pdf
Hª de España a través de la literatura, ojala me hubiesen dado a mi historia así http://algargoshistoria.lacoctelera.net/categoria/c-novela-historia-espana
Y "el problema de España" o lo que otros llamamos simplemente España http://es.wikipedia.org/wiki/Ser_de_Espa%C3%B1a (no perderse la foto la cara de Belmez con chapela aka Sabino Arana)
Con clásicos básicos de la literatura como:
Aquí yace media España, murió de la otra media (Larra)
Me duele España (Unamuno)
De entre todas las historias de la historia, la más triste es la de España, porque termina mal. (Gil de Biedma, se ve que era vidente el hombre y ya previó que su sobrina la Espe sería la presidenta de esta nuestra comunidad)
Ya hay un español que quiere
vivir y a vivir empieza
entre una España que muere
y otra España que bosteza
Españolito que vienes
al mundo, te guarde Dios
una de las dos Españas
ha de helarte el corazón (Machado, el bueno)
A mi me salvo Baroja sobre todo "la Busca" y Galdos (más rollo telenovela) me gustá más la novela histórica (en un sentido amplio del termino) internacional tipo "las uvas de la ira". Seguid con el buen trabajo Xx
Me gusta la portada, eso ya es un plus!
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